El Dr. Hamer elimina algunos dogmas médicos
A nivel científico, un dogma es una proposición considerada cierta y un principio innegable. Además, está definido como un conjunto de creencias de carácter indiscutible y obligatorio para los seguidores de cualquier religión.
Hay muchos casos de ello en la historia. Por ejemplo, en la época de Isaac Newton, algunos fanáticos religiosos concluían que la piedra que caía sobre algún dedo del pie estaba dirigida por la fuerza de Satanás, que con gusto la dirigía malevolamente para causar el máximo daño posible.
Pero gracias a la ciencia, Isaac Newton demostró que no era una fuerza del "demonio”, sino una de la naturaleza a la que denominó «la ley de gravitación universal». Hoy todos sabemos que es una ley física clásica que describe la interacción gravitatoria entre distintos cuerpos con masa.
Y así, la ciencia fue eliminando poco a poco el fanatismo religioso.
Sin embargo, en la actualidad algunos dogmas también se han incrustado en la medicina convencional. Por ejemplo, la teoría de la infección, también conocida como teoría germinal de las enfermedades, sostiene que muchas enfermedades son causadas por microorganismos, como bacterias, virus, hongos y parásitos. El químico francés Louis Pasteur no era médico, pero fue el pionero en construir esta teoría y difundirla hasta tal punto que actualmente tiene casi una aceptación universal.
El dogma en el que un gran porcentaje de la causa del cáncer se debe “al azar”, es decir, a la “mala suerte”. Este nuevo dogma se basa en un estudio científico en la prestigiosa revista Science publicado en 2015. A pesar de que hay médicos que han protestado contra este nuevo dogma de la medicina convencional, existe un fanatismo "científico" que sigue dominando el mundo sanitario. (Ver Cáncer no es mala suerte )
El Dr. Ryke Geerd Hamer ha aportado ciencia a la medicina. Con sus 5 leyes biológicas se elimina mucho fanatismo dogmático. El Dr. Hamer explica que en muchas áreas de la medicina convencional se actúa como en una religión en la que hay que repetir de memoria muchos dogmas. Por favor, leer este tema en su libro de Oro "Un legado de una nueva medicina".
Hay muchos casos de ello en la historia. Por ejemplo, en la época de Isaac Newton, algunos fanáticos religiosos concluían que la piedra que caía sobre algún dedo del pie estaba dirigida por la fuerza de Satanás, que con gusto la dirigía malevolamente para causar el máximo daño posible.
Pero gracias a la ciencia, Isaac Newton demostró que no era una fuerza del "demonio”, sino una de la naturaleza a la que denominó «la ley de gravitación universal». Hoy todos sabemos que es una ley física clásica que describe la interacción gravitatoria entre distintos cuerpos con masa.
Y así, la ciencia fue eliminando poco a poco el fanatismo religioso.
Sin embargo, en la actualidad algunos dogmas también se han incrustado en la medicina convencional. Por ejemplo, la teoría de la infección, también conocida como teoría germinal de las enfermedades, sostiene que muchas enfermedades son causadas por microorganismos, como bacterias, virus, hongos y parásitos. El químico francés Louis Pasteur no era médico, pero fue el pionero en construir esta teoría y difundirla hasta tal punto que actualmente tiene casi una aceptación universal.
El dogma en el que un gran porcentaje de la causa del cáncer se debe “al azar”, es decir, a la “mala suerte”. Este nuevo dogma se basa en un estudio científico en la prestigiosa revista Science publicado en 2015. A pesar de que hay médicos que han protestado contra este nuevo dogma de la medicina convencional, existe un fanatismo "científico" que sigue dominando el mundo sanitario. (Ver Cáncer no es mala suerte )
El Dr. Ryke Geerd Hamer ha aportado ciencia a la medicina. Con sus 5 leyes biológicas se elimina mucho fanatismo dogmático. El Dr. Hamer explica que en muchas áreas de la medicina convencional se actúa como en una religión en la que hay que repetir de memoria muchos dogmas. Por favor, leer este tema en su libro de Oro "Un legado de una nueva medicina".
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